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Y empezó a llover gotas de luz
Mi piel se fundió con mi alma
En un campo bello donde se distinguía un camino dorado…

Camine feliz por la senda trazada
Hasta llegar a una humilde casita blanca
Con una gran puerta de color verde
Sentía que parte de mi vida estaba detrás de esa puerta…

Abrí la puerta y la energía iluminaba cada poro de la casa
Allí lo vi, como si estuviera toda la vida esperando que llegara…

Entre a una gran sala en la que destacaba una vela en el centro
Me acerque a ella y empecé a soplar con suavidad
Con cada respiración soplaba un poco más
Y la llama crecía viva…
Esa llama se convirtió en un lindo pajarillo
De ojos marrones mirada inocente se poso en mi dedo
Me sentí mas vivo que nunca

No le dije nada a mi guía
Solo quería disfrutar el momento
Era tal la alegría y la emoción que el mundo se detuvo
Fueron segundo eternos…

Le di las gracias por estar siempre ahí
Y le dije que pronto volvería
El pajarito volvió a ser la vela
Y retome el camino de vuelta…

03/04/10

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